Correspondencia sobre "Nuestra cosa perdida"
Buenos Aires, jueves 29 de mayo de 2025.

A una compañera de las palabras,

Intento hacer unos apuntes sobre Sobre nuestra cosa perdida, de Martina Cruz. Demoro en tomar notas, releo libros viejos. Quiero decir algo nuevo sin poner palabras en imágenes que no son mías. Me siento entrometida. ¿Será que la escritura hace raíz en la osadía?

Una película de una hija sobre el deseo de su papá de hacer una película.
Una película es muchas cosas; esta película le hace honor a esa fuga.

La directora hereda de su padre una bolsa con VHS, guiones, ropa vieja, cintas familiares. La hija le hace preguntas al archivo. Necesita averiguar cuál era el film favorito de su papá para poder entrar a su mail. Quiere encontrar el guion del largo que fantaseaba hacer su padre. Daniel dijo: “No me puedo morir porque no hice una película.” ¿Será el documental de la hija una forma de romper la maldición del padre? ¿Por qué su padre no logró hacer una película?

A lo largo de las cintas familiares vemos a un padre director: da órdenes de cómo sostener la cámara, indicaciones sobre un paneo. Escribe guiones. Convence a sus amigos para integrar el equipo técnico. Su esposa se encarga de mantener económicamente a su familia con tal de que Daniel haga la película. Es decir, él convence al resto. Contagia de entusiasmo, y eso, a mi entender, es ser un director. Pero hay más. Ese ánimo que tiene Daniel es lo que hace que en los registros se lo vea feliz. Su expareja narra que cuando tuvo la oportunidad de ir a filmar a Base Marambio estaba desganado. ¿De qué dependía la felicidad de Daniel? No creo que de lograr hacer una película. Porque la felicidad no tiene que ver con el éxito, tiene que ver con el entusiasmo. Paul Preciado, en su libro Un apartamento en Urano. Crónicas del cruce, escribe:

La felicidad entendida como éxito personal no es sino la extensión de la lógica del capital a la producción de la subjetividad. La felicidad no se consigue a través del management emocional, ni reside en el equilibrio psicológico entendido como gestión de recursos personales y control de afectos. Más difícil aún de creer, y por tanto probablemente cierto, la felicidad no depende de la salud, ni de la belleza. Ni coincide tampoco con la bondad.
(Preciado, 2019: 129)

La felicidad no coincide con la bondad. Esta película es amorosamente justa. La directora entrevista a su mamá, Catalina, quien se separó de su padre; a su hermana Julia, hija de Daniel; y a los amigos de él. El montaje aloja el resentimiento de una madre y una hija hacia el padre, y la añoranza de sus amigos. Hace un acto de justicia, para narrar la complejidad de una paternidad. Catalina cuenta que Daniel, con la plata del viaje a Base Marambio, le compró un regalo a Martina, cuando esa plata era para pagar deudas. Catalina tiene puesta esa camisa. Viste la rabia. ¿Por qué? Mastico esa imagen varias horas en mi cabeza. Atisbo a pensar que perdona a un muerto poniéndose esa camisa.

Los cruz no se rinden.

Daniel soñaba con una película quimera.
Una quimera es un animal
que tiene la fuerza de tres.
Cuerpo de cabra,
cola de serpiente,
cabeza de león.
Para vencer al monstruo
hay que tener garra, estrategia y dignidad.
Solo así se hace una película.

Nicole Lareo
Publicado 08/08/2025